Despidos masivos en las Big Tech – 25 de enero

Víctor García Guerrero27 enero, 2023

Las grandes empresas tecnológicas de Estados Unidos están haciendo despidos masivos. Amazon: 18.000 trabajadores. Google: 12.000. Meta: 11.000: Microsoft: 10.000. Twitter: 4.000. Desde el inicio del año pasado, son más de 200.000 despidos. Los buques insignia del capitalismo estadounidense echan a gente para ganar más. Porque el año pasado tuvieron beneficios, pero más reducidos que en épocas anteriores, y eso les hacer perder valor en Bolsa. Los inversores, auténticos dueños de estas empresas que viven del préstamo, quieren ganancias a costa de los humanos que las integran. Los trabajadores sirven para socializar las pérdidas.

Las Big Tech despiden porque aseguran que los trabajadores contratados durante la pandemia sobran. Pueden hacerlo porque apenas tienen resistencia, o sea, sindicatos. En Amazon consiguieron abrir uno el año pasado después de una lucha feroz con amenazas y chantajes por parte de la compañía. En Microsoft tienen otro en su división de juegos online. Es el primero en cuarenta y siete años de la empresa que suministra el sistema operativo de tres de cada cuatro ordenadores. El resto tiene Linux y OS, de Apple, que también estrenó sindicato en 2022: este lo permitió en una tienda de Baltimore. En el mundo tech, solo son proletarios los vendedores, los cuellos azules, no el programador ni la product manager.

Riley Rojas publica en TikTok un día en su vida como gestora de productos de Meta, el paraguas de Facebook e Instagram. Riley, influencer de veintitrés años, consulta su agenda de tareas y autodefiniciones: soy bella, soy increíble. Va al gimnasio, se hace un selfi, desayuna brócoli, mango y huevos revueltos, se toma un café con leche en el trabajo, donde hace sus labores en una terraza con vistas a la bahía de San Francisco, almuerza un snack en bolsa reciclada y vuelve a casa en autobús, donde se encuentra con colegas y su novio, que hace de DJ para su perro. Riley puede ser despedida en cualquier momento: el american dream hay que vivirlo como los milagros, aquí y ahora.

Los despidos masivos en Estados Unidos no provocan huelgas como sí hacen todavía las políticas neoliberales del Reino Unido. Allí los sindicatos nunca fueron del todo exterminados aunque el pop presagiaba la evasión. En A day in the life, Lennon y McCArtney describían un accidente de tráfico, una victoria de Inglaterra en la guerra y un canuto que hacía soñar. Era 1967 y el Sargento Peppers se despedía y ponía fin al verano del amor, de Liverpool a Berkeley. Unos hippies se irían de rave a las playas y praderas. Otros buscarían el oro en la tecnología. Al Che lo mataban en Bolivia mientras una reacción se preparaba para ser televisada en un smartphone lleno de corazones de mentira.

Extramuros es una columna informativa de Efecto Doppler, en Radio 3.